martes, 17 de septiembre de 2019

"MAMIA" un homenaje a la creadora, por Luis Salgado

Fotografía: Luis Salgado "No quiero madre"
El 1 de agosto, Luis Salgado me escribía por Facebook:
El 5 de septiembre a las 20:00 horas inauguramos una exposición en la sala Amárica en la cual participo. Somos varios ex alumnos de la escuela de artes y cada uno ha presentado un proyecto distinto. Mi proyecto se llama "MAMIA". Me encantaría que tú estuvieses allí y me dieses tu opinión. Imprescindible que tengas en el móvil un lector de códigos QR y que lleves unos auriculares. Prometo sorprenderte.

Y sí, me sorprendió. Conocía a Luis haciendo fotografías a las gentes de Kuartango. Después descubrí su proyecto Fenotipos y sus Dichógrafos populares. Pero desconocía su faceta poética, como escritor de sus emociones y pensamientos desde bien joven.
Muchas son las acepciones de la palabra “mamia”. Por un lado, como nombre, mamía es miga, pulpa, meollo, molledo. También cuajada o leche cuajada. En definitiva, podría definirse como esencia, sustancia, importancia, fundamento, virtud interior. Por otro lado, como adjetivo, viene a significar íntimo, querido, entrañable, así como fértil, fecundo, fructífero… Desde un punto mucho más subjetivo, a mí me reconduce a otra palabra que marcó mi niñez y cuyo origen es totalmente distinto, pudiendo su significado englobar todos y cada uno de los conceptos enumerados anteriormente: “miajón”. Miajón es la palabra que emplea el poeta extremeño Luis Chamizo en su obra “El Miajón de los Castúos” (1921) para definir la miga, la entraña, el jugo, el tuétano, la esencia y el carácter de la gente del pueblo. En todo caso, ambas palabras, me llevan por un mismo camino a lo que para mí podría ser la esencia y la miga de una parte importante de mi mundo interior. Una de las personas que más me motiva y me mueve, que me hace crecer y cuestionarme: mi madre. Ella ha sido siempre una raíz importante, parte del alma que marca mi personalidad, ese mundo interior del cual surgen mis seguridades y mis miedos, mis motivaciones y, en consecuencia, también mis obras. Así pues, con este proyecto, que consta de 10 fotografías y otros tantos textos, que apoyan y complementan a cada una de ellas, he querido hacer un homenaje y un reconocimiento a su personalidad y a su persona; a su historia personal y sus raíces; a su parte más humana y también a la más física, forjada por el tiempo y la experiencia. A ella personalmente y, en general, a la figura de la madre. Luis Salgado
"Tu pecho" "Tu espalda" por Luis Salgado. Fuente: Noticias de Álava

Un regalo recíproco: del concebido a la creadora y del creador de imágenes a la protagonista de las fotografías. "Tu vientre", "La siesta", "Raíces", "Tus manos" y así hasta diez regalos para la vista y los oídos que Luis nos fue explicando emocionado e ilusionado. Diez momentos en la historia de vida de una mujer que, como para tantas mujeres que nacieron en los años 30, no fue fácil, y menos para quienes vivían en el medio rural de Extremadura. Inevitablemente, las imágenes y las historias me recordaron a mi abuela Manoli, quien siempre me cuenta mil y una historias, algunas repetidas (para que me las grabe a fuego y no se me olviden) y otras nuevas que va recordando, o que considera que es hora de que salgan...

Pincha aquí para escuchar los 10 poemas que contextualizan las 10 imágenes seleccionadas en este trabajo, muy íntimo y personal, llamado MAMIA.

Hasta el 17 de noviembre de 2019, en la Sala Amárica, podéis ver MAMIA y 5 trabajos más de artistas que se han formado en la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria-Gasteiz.
Fuente: Departamento de Imagen de la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria-Gasteiz

1 comentario:

Luís Salgado dijo...

Gracias por tus palabras, Mentxu. Para mí son todo un honor.