Mi amiga Ester Bonet me pasaba hace unos días un texto sobre 'economía del comportamiento' y me decía que creía que podía aplicarse a muchas de las redacciones de biografías en Wikipedia:
Se afirma que: "... no hay nada más natural que los sesgos. Una "ley del mínimo esfuerzo" general se aplica tanto al esfuerzo cognitivo como al físico. La ley afirma que si hay varias formas de alcanzar el mismo objetivo, la gente acabará por gravitar hacia el curso de acción menos exigente. En la economía de la acción, el esfuerzo es un coste, y la adquisición de habilidades se rige por el equilibrio de beneficios y costes. La pereza está integrada en nuestra naturaleza" (Daniel Kahneman)
Comparto al 100% el análisis de Kahneman. Y voy a extrapolarlo a la vida misma.
En mi familia, observo clarísimamente distintos comportamientos, centrándome en el uso de herramientas para realizar labores/tareas "físicas":
- Hay familiares que tienen herramientas para todo, organizadas, en perfecto estado: eficacia máxima si no fuera un poco caótico en la ejecución... pero, ¡¡¡la intención es super buena!!!
- Y familiares que casi no tienen herramientas y usan cualquier herramienta que pillan: eficacia mínima e inversión de energía y de tiempo exagerada.
- Luego estamos mi abuela y yo: observadoras, perezosas y disfrutonas de la vida... tratando de minimizar el esfuerzo haciendo lo que haya que hacer de la forma más sencilla posible... escaqueándonos o encasquetando la tarea a quien quiera hacerla, que nosotras estamos muy a gusto haciendo NADA, mirando cómo hacen, sugiriendo mejoras y... disfrutando de la vida...
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